Ya habían pasado varios años desde la última presentación de la agrupación filandesa de metal sinfónico Nigthwish en nuestro país, y fue la noche del sábado del pasado 10 de octubre, que Bogotá se vio abrumada nuevamente,  pero  esta vez con la voz y presencia en escena de Floor Jansen, quien hizo cabecear a todos los espectadores y fanáticos, precedida de la banda holandesa Delain, quien fue telonera con gran auge entre el público.

Con su performance Delain logro conmover tanto a fanáticos como a espectadores a quienes desconocíamos su calidad musical a profesidad, generando tal feeling al ver el movimiento sincrónico de sus cabelleras; con su vocalista Charlotte hasta el bajista con su ondulante cabellera rubia Otto, logrando un excelente show con sus excelentes interpretaciones de los temas "April Rain" y "We Are the Others"; quedándose en nuestras mentes y porque no, en nuestros corazones como una banda de gran calidad y armonía, sencillamente impecable y sensible.

Transcurría la noche, la audiencia ya entrada en calor (gracias a Delain), empezó a sentir la ansiedad al ver como a las 9:35 pm el equipo de producción y arreglistas musicales disponían todo para Nightwish,…el público aclamaba a la banda…y siendo las 9:50, al sonar el interludio  de "Shutter before the Beautiful";  el público estalla en euforia por la banda filandesa, con un fondo romántico azulado la agrupación empieza a salir a escena, Pero es con la salida a escena de Floor que el teatro se conmociona con su impactante belleza nordica, su vestuario  y con su voz; la cual, unos cuantos, estábamos algo escépticos por el nivel vocal y el show, debido a nuestro cariño y admiración por Tarja quien fue cofesadora de la banda y cuenta aún con muchos fanáticos, y los cuales en esta noche, descubrimos en Jansen una gran esencia y melodía que nos recuerda los comienzos de Nightwish.

El show de luces generó una atmosfera que iba desde lo romántico y clásico con "She is my Sin"; bajo  la gran interpretación de la gaita por parte de Troy Donockley. Se rememora a un paisaje épico;  el pensamiento evoca a una tierra nórdica a través de la voz de Marco Hietala cantando "The Islander", y  el climax cambia. "The Ghost Love Score" revitaliza al público;  viviendo momentos algo mas rítmicos, con acordes rápidos y la magia que se siente a través de los dedos de Tuomas Holopainen con su teclado, evocando canciones más recientes y con gran fuerza musical como "Elán", "Alpenglow", "Storytime", "Stargazers", hasta recordar "Sleeping Sun", con la cual Floor demostró firmemente su gran talento y carisma en tarima. Y a pesar de los problemas con el sonido que ocasionaron que en algunos instantes la voz de Marco no se denotara como líricamente debía ser sobre la de Jansen, los espectadores pudieron disfrutar de los sonidos y esencia de la banda.

Agoniza la noche en tanto que nuestra bandera tricolor en manos de Floor, se ondulaba al aire con "The Last Ride Of The Day", siendo así el último viaje del día, de una gran noche que estalla en satisfacción por un concierto esperado por muchos, y sorprendente para todos los amantes del metal sinfónico y de esta gran banda que aunque se sintió la ausencia de canciones emblemáticas como "Nemo" y "Wishmaster", lograron mover y trasmitir a los bogotanos y extranjeros, buena vibra, melodía y contenido musical.

Aquí todas las fotografías del concierto.